Se diseña una nueva identidad corporativa para el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires. Dentro de la marca principal hay dos submarcas, asociación y tienda. Para diferenciarlas se utilizan tramas con formas que habitan en las obras que se encuentran en el Museo. Éstas están compuestas por formas abstractas y geométricas, representando la estética que tiene el museo en su interior.  Cada manual contiene en proceso detallado del diseño de la marca y sus aplicaciones.